La gimnasia cerebral o brain gym, creado por Paul Dennison y Gail en la década de los 70, es un programa pedagógico basado en el movimientos corporales organizados para generar sustancias endógenas en el cerebro.
El brain gym utiliza sencillos ejercicios para la integración de todo el cerebro, los sentidos y el cuerpo con el objetivo es mejorar habilidades de aprendizaje, atención, emociones y comportamiento.
Estos movimientos están diseñados para estimular el cerebro en sus funciones cerebrales de espacio, lateralidad, centrado y foco. También son una herramienta útil para tratamiento de dificultades lectoras, escritura, dislexia o hiperactividad.
¿Cómo funciona el brain gym?
Es a través del movimiento como se desarrollan las conexiones neuronales del cerebro. Los movimientos musculares coordinados activan la producción de neurotrofinas, sustancias naturales que estimulan el crecimiento de las células nerviosas e incrementan el número de conexiones neuronales en el cerebro.
Mediante estos movimientos desarrollamos nuestra capacidad cerebral, formando redes neuronales a través de los músculos.
¿Podemos hacer ejercicios también con el cerebro? ¡No hay aprendizaje sin movimiento!
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¿Cuándo es importante aplicar el brain gym?
Es importante estimular y motivar a los niños en todo lo que implique movimiento a través de los ejercicios desde el punto de vista psicomotor que se proponen en el colegio, actividades extraescolares y deportivas. Además de trabajar nuestro cerebro creará toda una serie de habilidades enriquecedoras.
El brain gym es interesante aplicarlo en niños que sufren por dificultades de adaptación en su entorno y por su alta sensibilidad, con TDAH o déficit de atención en los niños o con problemas debidos también al estrés curricular.
Además, cuando el niño desencadena una emoción como por ejemplo el miedo a un examen o al fracaso, la falta de fluidez en sus lóbulos frontales dificulta el acceso a la información. En estos casos es importante que puedan realizar una actividad física sistemática para permitir que el propio cuerpo se vaya re-equilibrando.
Importancia del desarrollo neuromotor del niño
El niño hasta los cinco años, se encuentra en un periodo evolutivo básicamente perceptivo motor y organiza su mundo a través de percepciones subjetivas, siendo su propio cuerpo el canal de adquisición de conocimientos.
Precisamente el objetivo de la psicomotricidad es conseguir una buena organización neurológica. También le ayudará a la producción de mielina, la sustancia que se encarga de la transmisión de los impulsos nerviosos.
Con las actividades de psicomotricidad ayudaremos al sistema nervioso a madurar, formar y consolidar circuitos neuronales.
Recordemos que el cerebro se entrena y nunca deja de trabajar, ni siquiera cuando dormimos.
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